Punto y aparte.

Ni he desaparecido para siempre, ni mucho menos me he dado por vencida! 

Actualizo el blog después de estar 4 días en paradero desconocido. He de admitir que la he cagado. Hasta el fondo. Hasta que ya no se podía más. Empecé bien la semana pero me he tropezado y he ido tropezándome cada día un poquito más. De jueves hasta hoy, desastroso. 

Ansiedad terrible (¡y aún la regla sin dar señales de vida!), ganas de comer "mierda" a todas horas, todo lo calórico con ganas de ir pa' dentro, 0 agua, muy poco deporte, en definitiva, una semana para olvidar. 

Por eso he decidido llamar a esta entrada "punto y aparte". Porque no quiero volver a descontrolarme (han sido 3 días cenando fuera, y por razones de celebraciones, ha sido un fin de semana-puente extraño, he de reconocerlo). Seguiré como siempre cenando fuera un día a la semana, y mañana de nuevo con las pilas cargadísimas, tanto en las comidas, agua, deporte, etc. 

No he perdido las ganas ¡ni muchísimo menos! sigo muy, muy liada con trabajos y cosas que estudiar de la universidad (se acercan exámenes parciales), así que espero poder hacer ejercicio esta semana. Juro que sacaré el tiempo de hasta debajo de las piedras! 

Así que mañana a comer limpito de nuevo, mucha agua, mucho ejercicio y vida sana, como debe ser. Con las sentadillas estoy que muero, no sé vosotros... Pero a mi 135 ya me pesan en en alma... No sé si podré aguantar todas las que tocan esta semana, es mucha caña, aunque lo intentaré. 

Sin nada más que contaros, me despido por hoy con una frase que me encanta y creo que tiene mucha, mucha pero mucha razón: 

"Lo llaman suerte pero es constancia, lo llaman casualidad pero es disciplina, lo llaman genética pero es sacrificio. Ellos hablan, tú entrenas." 

¡Os leo!